“Nos señalaron, nos echaron y ahora buscamos respuestas juntos”: nace un grupo de afectados por el trato en Old Trafford

Lo que empezó como un viaje ilusionante para animar al Athletic Club en la semifinal de la Europa League, ha acabado en una amarga experiencia para cerca de 150 aficionados rojiblancos. Muchos de ellos ni siquiera llegaron a entrar al estadio de Old Trafford el pasado 8 de mayo. Otros fueron expulsados después de haber accedido, señalados por hablar en castellano o simplemente por no ser ingleses. Hoy, todos comparten algo más que el dolor de una derrota: han creado un grupo para apoyarse y exigir respuestas.

“Nos hemos unido porque solos no podemos hacer nada. Nos han tratado mal, y ahora buscamos que se nos escuche. Y que el club nos respalde”, explica Eneko Garay, uno de los impulsores del grupo y afectado directo, en declaraciones a Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia.

Entradas legales, trato humillante

Los afectados compraron sus entradas en la web oficial del Manchester United, al no conseguirlas en el sorteo del Athletic. Introdujeron sus datos reales, sin ocultar su procedencia. Pero cuando llegaron al estadio, fueron rechazados en taquilla, con la excusa de que era “por su seguridad”.

“Te reconocían por el nombre, por el idioma… y te echaban. A niños les tiraron del pelo, a críos les hacían cortes de manga. Fue un trato vejatorio. Nos cancelaron las entradas directamente y nos mandaron a las oficinas, donde nadie sabía qué decirnos”, relata Garay. En el grupo de WhatsApp ya han compartido facturas de más de 1.100 euros por persona entre vuelo, entrada y alojamiento.

“Me escupieron delante de mi hijo”

Oier Manuel, también entrevistado en Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia, viajó con su hijo de 13 años. “Entramos sin problema. Nadie llevaba camisetas del Athletic, íbamos de calle. Pero tras el primer gol empezaron a señalarnos. A mi hijo lo escupieron, le hicieron gestos obscenos. Fue algo que jamás pensé vivir en un campo de fútbol”, cuenta con la voz aún temblorosa.

Asegura que fueron sacados del campo “con excusas de reubicación”. Pero no hubo reubicación. “Nos vimos en la calle. Como muchos otros. Y lo peor fue ver a mi hijo llorando y no poder explicarle por qué nos trataban así”.

Apoyo del Athletic: la esperanza del grupo

El grupo de WhatsApp se ha convertido en un refugio para los afectados, pero también en una plataforma para canalizar su reclamación. Han pedido al Athletic Club que les ayude a denunciar lo ocurrido y a abrir un canal institucional con el Manchester United o con UEFA.

“No culpamos al Athletic. Al revés. Queremos su apoyo porque somos socios, seguidores, familias que solo fuimos a animar. No hicimos nada malo. Solo queremos justicia y que esto no se repita nunca más”, afirman.

A veces, lo más doloroso no es perder un partido. Es perder la confianza en el respeto que debería acompañar siempre al deporte.Y por eso, en este grupo de WhatsApp ya no solo se habla de fútbol: se habla de dignidad, de niños llorando, de familias unidas... y de una historia que no quieren dejar pasar en silencio.