La UCO subraya la "participación directa" de Ábalos en el piso de Jessica, que lo llamaba "casita de novios"

Madrid

El último informe aportado por la UCO de la Guardia Civil al magistrado del Tribunal Supremo que investiga el caso Koldo apunta a una "participación directa" del exministro José Luis Ábalos en la gestión por la que un socio del comisionista Víctor de Aldama le estuvo pagando más de dos años un piso a la que era su novia, Jessica Rodríguez. Ella, de hecho, se refirió a la vivienda como la "casita de novios" de ambos. Cuando tuvo que dejarla, se lo reprochó a Ábalos: "En esta mierda me has metido con el puto piso".

Para los investigadores, los mensajes y audios incorporados al sumario revelan "no sólo que Ábalos estaba informado sobre la situación del alquiler de la vivienda en la que Jessica pretendía residir" cuando estaba eligiendo, sino que "de manera insistente", solicitaba a su asesor Koldo García gestiones al respecto. Él, de hecho, se lo transmitía así a la mujer: "La verdad que el jefe me lo pide en todo momento".

En este sentido, la UCO destaca un episodio de 2019, cuando en esa búsqueda de vivienda de Jessica Rodríguez, Koldo García envió a Ábalos los pisos que estaban disponibles. Él le contestó indicando cuáles se podían visitar, por lo que la Guardia Civil interpreta que debió llamar a los arrendadores personalmente.

Sobre el pago de la renta y la gestión del contrato, que asumía el socio de Aldama Alberto Escolano, Koldo hablaba al entonces ministro en tercera persona del plural, lo que lleva a la Guardia Civil a presumir que había también conocimiento de ello. Pone un ejemplo, un mensaje en el que Koldo le dice a Ábalos: "Firman el contrato y se lo dan" (a Jessica).

"Pasé la factura a Alberto"

Pero no es la única referencia. Ya constaba en el sumario que Jessica tuvo problemas con la nevera en 2020 y escribió tanto a Escolano como a Koldo García. Pues este habló de ello con Ábalos y el ministro preguntó "de dónde" era el frigorífico que habían comprado. "Koldo respondía: IKEA. Fui a comprarla y le paso factura a Alberto”.

La UCO habla por ello de "conocimiento" de Ábalos, como cuando en febrero de 2020 avisó a Koldo García de que a Jessica Rodríguez le quedaban dos semanas de contrato o le pidió "mirar la prórroga".

No parecía que fuesen a conseguir renovar el alquiler y Ábalos se interesó personalmente por las alternativas que tenía ella de alquilar otro piso. Mientras, a las preocupaciones de Jessica iba contestando "lo arreglaremos", "me pongo a ello". Finalmente, Escolano logró la renovación del mismo piso, como Koldo García se encargó de comunicar a Ábalos.

Los investigadores dicen que esta tesis se ve reforzada por lo que ocurriría ya cuando en octubre de 2020 Escolano empezó a fallar en algunos pagos. La inmobiliaria a quien pedía explicaciones era a Jessica y ella se estaba agobiando, como trasladaba tanto a Koldo García como al propio Ábalos.

"Terceros que no me cuentan ni la mitad"

Consta en este contexto un audio que ella envía al asesor: "Lo que no puede ser es que a mi me llevan tres meses llamándome para decirme que no se están pagando las cosas, yo tengo que aguantar esas llamadas cuando no tengo ni puta idea de lo que pasa ni lo que deja de pasar (...) haced lo que vosotros veáis, como vosotros veáis y vosotros consideréis (...) bastante incertidumbre es el no tener un puñetero sitio donde poder plantar el culo, como para encima que eso dependa de otras personas que no me cuentan ni la mitad".

Ese apuro de impagos lo salvarían entre Koldo García y su hermano Joseba, como indica la Guardia Civil, que apuntala su tesis con una conversación más, esta ya de la recta final, cuando Jessica tuvo que dejar el apartamento en la madrileña Plaza de España, en marzo de 2022. Le dijo a Ábalos, tras consultar a un abogado: "En esta mierda me has metido con el puto piso”.

La tesis de la Guardia Civil contradice lo que viene manifestando Ábalos en el Supremo, donde depositó toda la responsabilidad sobre la gestión y el mantenimiento del piso de Jessica Rodríguez en Koldo García, alegando que ambos se conocían de antes y eran amigos. Él a titulo personal, pudo ayudarla económicamente alguna vez, pero nada más.

Se desmarcaba así de la intervención del socio de Aldama que en el Tribunal Supremo se lee como otra contraprestación más al entonces ministro bajo sospecha de delitos de cohecho.