Melody: "No me preocupa cómo voy a quedar en Eurovisión. Quiero un buen puesto, pero hay cosas que no están en mi mano"
La representante de España en Eurovisión hace balance sobre el precio de la fama desde muy pequeña, recuerda sus inicios en la música y confiesa cómo se siente a falta de un mes para el festival

Madrid
Fue la escogida por la inmensa mayoría del público que siguió el Benidorm Fest, a pesar de no contar con el firme apoyo del jurado profesional. Su victoria en el festival empujó a Melody a convertirse en la nueva representante de España en Eurovisión, que este 2025 se celebra en Basilea (Suiza). Desde el día siguiente de ganar, su carrera, ya consolidada, dio un vuelco de 180 grados y todavía no ha podido sentarse a digerir que el próximo 17 de mayo cumplirá su sueño de representar a su país en el certamen de la canción.
Más información
Un mes antes de viajar hasta Suiza y poner en pie Esa diva ante la millonaria audiencia que sigue el festival, Melody llega a los estudios de la Cadena SER en un día lluvioso, bajo un paraguas medio abierto, vestida con La noche estrellada de Van Gogh estampada en un corsé, y con una sonrisa que paseó por toda la redacción mientras recibía comentarios positivos y deseos de suerte en la que ella considera "su nueva aventura".
A diferencia de Chanel, Blanca Paloma o Nebulossa, anteriores representantes españolas surgidas del Benidorm Fest, Melody ya es un rostro conocido para toda España antes de conocerse como la elegida para ir a Eurovisión. Desde que era bien pequeña ya se subía a los escenarios con canciones como El baile del gorila o De pata negra, y su presencia no era algo poco habitual en los medios de comunicación, donde mostraba su talante y su enorme personalidad.
"He tenido una infancia diferente, pero no por ello menos feliz"
Melodía Ruiz, que así se llama en realidad, vivió una infancia muy diferente a la de cualquier niña, pero una infancia feliz. "Mi padre es artista desde pequeño y ha sido mi fuente de arte. He escuchado a mi padre cantar, bailar... Ver eso desde pequeña me ha hecho ser quien soy. La música era una más en la familia, y eso me ha ayudado a nutrirme y no tener límites musicalmente", reconoce en la charla con la SER, repasando su vida.
"He tenido una infancia diferente, pero no por ello menos feliz. Cada persona tiene una misión en la vida y yo la cumplí a temprana edad. He ganado aprender y ver la vida desde muchas perspectivas desde muy pequeña. Poder cantar en diferentes países del mundo y culturas ha sido maravilloso", asegura, sobre las giras que hacía con solo 10 años y que llegaron a Venezuela, Puerto Rico o Estados Unidos.
Y desde que era bien pequeña, como reza la letra de su Esa diva, para Melody la música fue su única ilusión. "Para mí es mi vida, lo he dado todo por la música", dice. "Si es verdad que con le tiempo valoras más la vida y vas dándote cuenta de cómo funciona todo, pero hay que valorar también el momento de llegar a casa, estar con la familia y poner ese punto a tierra que te reubica y te baja para saber donde estás", afirma.
"Es una parte fundamental en mi vida y una apuesta grandísima, he dado mi vida por el arte y creo que tenemos que apostar por uno mismo. Estoy muy contenta de lo que hemos conseguido, el público después de 24 años me sigue queriendo y apoyando, y eso es un lujo", añade, muy emocionada al echar la vista atrás.
Melody, de triunfar con 'De pata negra' a representar a España en Eurovisión 20 años después
Su nueva faceta musical, su nueva "aventura", la lleva ahora hasta Suiza para representar a España en Eurovisión 2025. Si su puesta en escena en el Benidorm Fest ya fue uno de los asuntos más comentados del festival, uno de los focos de cara al certamen en mayo se vuelve a posar sobre qué hará Melody mientras interpreta su tema.
"Se van a cambiar cosas. Una cosa fue el Benidorm Fest y otra Eurovisión. Hemos pasado a diferente plano, pero estoy peleando porque hay cosas que tienen que estar", asegura, sin especificar a qué se refiere. El público lo que sí reclama son muchas cosas: una mejora del vestuario, que se mantenga el dancebreak, o que haga uno de sus pasos más tradicionales, el helicóptero con el pelo.
Justamente este movimiento de pelo es algo que ha dejado en interrogante y mantendrá la incógnita hasta la gran final de Eurovisión el 17 de mayo. "Lo bailo desde pequeña, pero crea controversia porque hay gente que lo entiende y otra que no", afirma. "A quien no lo entiende, yo le digo: '¿Crees que a Lady Gaga le importa cuando ella hace sus locuras?'. A la artista a la que limitan porque no quieren que sea ella misma, no es la misma. Lo bonito es tener personalidad y su punto. Cuando te crees lo que haces, eso traspasa fronteras", sentencia.
Y, finalmente, sobre las apuestas, que a día de hoy le dan un puesto 28, y su posición final en el festival, Melody afirma que no le preocupa lo más mínimo. "Eso sí, quiero quedar en un buen puesto, pero quiero hacer un buen trabajo, dejar el listón alto con la puesta en escena y mi interpretación, y hacer un buen show. Con eso, me quedaré a gusto, porque hay cosas que entiendo que no están en mi mano", dice.

Elian Vayá
Nacido en Alzira (València). Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Redactor...