Los peligros de decir lo que piensas
Francesc Miralles, motivador de 'Si Amanece', tiene las claves para no ser un bocazas

Los peligros de decir lo que piensas
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En las últimas semanas hemos visto cómo un twit de una línea hizo perder a Elon Musk más de 20.000 millones en un día del valor en bolsa de sus empresas. A veces un comentario no meditado no nos hace perder dinero, pero sí nos deja en ridículo, como cuando el presidente americano dijo hace unos días que "Estados Unidos e Italia han sido amigos desde los tiempos del Imperio Romano".
A pequeña escala, a todos se nos va la lengua a veces, y luego lo pagamos caro. Para cuando queremos desdecirnos, suele ser demasiado tarde: el mensaje —o twit— ya ha quedado grabado a fuego en la mente de quien lo recibe. Tal vez por eso dicen los chinos eso de "cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie, y cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta".
Además, por el sesgo negativo de información que predomina en el ser humano, algo dicho con mala pata puede terminar con años de buena relación. Por eso mismo, recomendaba Erasmo de Rotterdam recomendaba: "de los ausentes o callo o hablo bien, que la mayor parte de las rencillas nace de la destemplanza de la lengua". Y es que es fácil quedar en evidencia cuando se habla de más, mientras que, por lo general, tendemos a pensar que las personas silenciosas saben más de lo que en realidad saben. Como decía Mark Twain, "es mejor tener la boca cerrada y parecer estúpido que abrirla y disipar la duda".
Como por la boca muere el pez, cinco claves para no ser un bocazas:
1. Concede una pausa a lo que quieres decir. Si es algo poco relevante, cuenta hasta diez. Si puede tener un impacto importante, déjalo dormir 24 horas.
2. Escucha en vez de hablar. Eso llevará tu atención a otro lugar.
3. Haz lo contrario de lo que te pide el cuerpo. La regla de "lo contrario es lo conveniente" funciona muy bien cuando tienes los nervios a flor de piel.
4. Recuerda que cualquier oportunidad para callarte es buena. Practica el Wu Wei, la filosofía china de no hacer.
5. Asume que no lograrás cambiar a nadie. Cualquier crítica pone al otro a la defensiva (o al contraataque). No lograrás que vean las cosas desde tu punto de vista, solo encabronar al otro. Nadie convence a nadie.